París, Francia.- La noche que prometía ser consagratoria para Luis Díaz terminó convertida en un episodio de contrastes y debate internacional. El extremo colombiano, actual figura del Bayern Múnich, firmó un doblete decisivo en la victoria por 2-1 frente al Paris Saint-Germain en el Parque de los Príncipes, pero su actuación quedó marcada por la dura acción que dejó lesionado al lateral marroquí Achraf Hakimi, lo que derivó en su expulsión tras una larga revisión en el VAR.
El partido comenzó con un ritmo intenso y muy físico. Díaz, asociado de forma brillante con Harry Kane, aprovechó espacios y errores defensivos para adelantar al conjunto bávaro a los 4 minutos y luego ampliar la ventaja a los 32. Su movilidad, velocidad y precisión lo han convertido, en pocos meses, en uno de los elementos determinantes del esquema del técnico Vincent Kompany. Los números respaldan su influencia: suma 10 goles y 5 asistencias, convirtiéndose en uno de los jugadores más desequilibrantes en las cinco grandes ligas de Europa.
Sin embargo, cuando el partido parecía encaminado a consolidar su noche perfecta, llegó la jugada que lo cambió todo. Hakimi, pieza fundamental del PSG, recibió una entrada por detrás de Díaz en una disputa por el balón. Tras la revisión, el árbitro mostró la tarjeta roja directa al colombiano. El lateral marroquí abandonó el campo entre lágrimas y posteriormente el club informó que padeció una “entorsis severa en el tobillo izquierdo”, con un tiempo de baja estimado de varias semanas, lo que pone en riesgo su participación en la Copa de África.
La polémica no tardó en escalar. En Francia y Marruecos, algunos calificaron la acción como imprudente; otros, como un exceso de intensidad propio del fútbol de élite. Figuras como Luis Enrique, técnico del PSG, buscaron quitar dramatismo: “Es un deporte de contacto”, declaró. Marquinhos agregó: “Sabemos que intentó jugar el balón, pero se pasó un poco”. Por su parte, Kane reconoció que fue una acción dura que cambió completamente el desarrollo del encuentro.
En redes sociales, Díaz recibió mensajes de apoyo y también ataques racistas, ante lo cual el jugador respondió enviando un mensaje de pronta recuperación a Hakimi.
Pese a la controversia, el Bayern Múnich continúa mostrando un rendimiento impecable: 16 victorias en 16 partidos, posicionándose como uno de los equipos más sólidos y temibles del continente.
Fuente: Andina