Regresa el villano

Figo vuelve al campo del Barça

El exjugador asistirá al duelo de Champions entre Barcelona y PSG como embajador de la UEFA.

Fuente: El Español

Barcelona.- Luis Figo estará en el Estadio Olímpico Lluís Companys de Montjuic, en calidad de embajador de la UEFA, para presenciar el encuentro de Champions League entre el Barcelona y el PSG. Su presencia revive viejas heridas en la afición culé.

El exfutbolista portugués regresa al feudo azulgrana 25 años después de su polémico fichaje por el Real Madrid, un traspaso que lo convirtió en el enemigo eterno del barcelonismo. La última vez que pisó un estadio del Barça fue en 2009, cuando vistió la camiseta del Inter de Milán.

A finales del año 2000, Figo pasó de ídolo a villano en cuestión de semanas. El traspaso que lo llevó al Real Madrid fue visto como una traición imperdonable, y en su primera visita al Camp Nou con la camiseta blanca vivió uno de los recibimientos más hostiles de la historia del fútbol. Los hinchas lo esperaron con insultos, pancartas, billetes con su cara e incluso lanzaron una cabeza de cochinillo al césped.

La tensión entre el portugués y la afición culé no se ha enfriado con el paso del tiempo. De hecho, en la final de la Champions femenina disputada en Lisboa, un sector de hinchas mostró su malestar al recordar su figura. Joan Gaspart, expresidente del Barça, lo calificó hace poco como “el único enemigo que tiene el club”.

En la tertulia del programa Tu Dirás de RAC1, algunos comentaristas criticaron la decisión de ubicar a Figo en el palco para este partido de máxima exigencia en la Champions. “Los equipos de protocolo habrían de haberse esforzado en tratar de evitar lo que para mí es una humillación”, señaló uno de los participantes.

Las declaraciones que el exjugador ha hecho en los últimos años sobre el Barcelona no han ayudado a suavizar el clima. En la opinión de varios sectores del barcelonismo, sus palabras han sido “indecentes” y solo han reforzado la percepción de traición.

Ahora, con el regreso de Figo como embajador de la UEFA, el ambiente vuelve a cargarse de simbolismo. La afición estará atenta, y el reencuentro promete ser un nuevo capítulo en una relación marcada por el desencanto y la hostilidad.

Fuente: MARCA